Jornadas

29/02/2020

ESTANCIA ÁGUILA NEGRA: Avance de integración en Misiones

Una jornada de campo para conocer la experiencia de la convivencia de la producción ganadera con la agrícola se realizó el 31 de enero en la estancia Águila Negra, en San Ignacio (Misiones). El evento incluyó orientaciones sobre plantas de cobertura, fertilización, manejo de enfermedades, para el caso del agro, más la suplementación a campo y terminación en confinamiento, para la parte pecuaria.

La actividad arrancó por la tarde y el clima veraniego fue lo suficientemente benévolo para que la jornada pueda desarrollarse sin mayores inconvenientes. Organizado en forma conjunta entre DSM Nutritionals Produts Paraguay y la firma Matrisoja, el día de campo fue propicio para conocer la transformación por la que atravesó un campo tradicional de ganadería con la integración agrícola y de cómo a su vez el sector pecuario se ve beneficiado en el futuro en este sistema productivo.

Con una buena cantidad de asistentes, entre productores de la zona, técnicos y otros participantes, el evento arrancó en la sucursal de Matrisoja, en San Ignacio. Felipe Borella Vignochi, gerente de la compañía, aprovechó para agradecer la presencia del público y brindó algunas orientaciones previas, así como detalló parte de las instalaciones y resumió la presencia de inversores más vinculados al agro en campos de fuerte tradición ganadera.

La empresa, cuyo nombre tomó del acrónimo de maíz, trigo, soja y arroz, con más de una década en el mercado, tiene su oficina central y centro administrativo en Hernandarias, sin embargo. A estos se suman unidades como la de San Ignacio. Esta está enclavada en unas 20 hectáreas, distante a pocos kilómetros del centro de la ciudad, y con una superficie construida por arriba de 1.800 metros cuadrados, siendo el silo granelero el de mayor infraestructura.

El silo granelero construido para procesamiento de semillas abarca más de 1.280 metros cuadrados de obras civiles, a lo que se suma el proyecto de depósito de 420 metros cuadrados y una oficina administrativa de 120 metros cuadrados. La unidad busca asegurar la rápida asistencia a los clientes de la zona. Para ganar tiempo, la comitiva solo realizó un reconocimiento visual rápido y luego ya se conformó la caravana de vehículos para el traslado correspondiente a la estancia, propiamente dicha.

Agricultura sobre potreros y pasturas

Borella Vignochi igualmente explicó los motivos que impulsaron a la firma a introducir la actividad agrícola en tradicionales tierras ganaderas, en donde el paisaje se confundía entre pasturas y potreros. Sin embargo, la salida técnica permitió ver otros matices proporcionada a la paleta por otros rubros hoy resaltados con mayor fuerza en los mismos campos, pero no por ello, relegando a la pecuaria sino por el contrario buscando el beneficio mutuo.

El gerente indicó que la visión de la empresa fue ampliar su radio de acción y llegar hasta esta zona. “Vimos a Misiones con buenos ojos de un potencial para su desarrollo no solo ganadero sino también en un sistema integrado con la agricultura. Esto hace que podamos desarrollar varias actividades, como en este caso acompañar la evolución de cultivos como soja, maíz y trigo, para lo cual está adaptado el silo. No así para arroz, que también es otro rubro que está presente en el departamento”, reconoció.

Entre los presentes se pudo observar a Paulo Modesti, director Comercial y Marketing y Desarrollo Estratégico de la empresa, quien acompañó todo el recorrido y reafirmó el compromiso para seguir creciendo, siempre al lado del sector productivo. En este sentido, se indicó que una de las estrategias fue buscar la alianza comercial con los proveedores, sobre todo aquellos con quienes se sintonizan en temas tales como tecnología, innovación, desarrollo y productos de alta calidad y alto rendimiento.

Víctor Valesi, del área de Desarrollo de Matrisoja, estuvo coordinando el evento y explicó cómo sería la temática de la jornada y las paradas. Ya en el campo, la primera estación tuvo que ver con la cuestión de manejo de enfermedades y sanidad de las plantas, sobre todo atendiendo los problemas causados por los nematodos, en donde se busca combatir principalmente a tres especies. Fueron instalados mapas satelitales y con detalles que se tienen en cuenta para conocer las características del terreno.

Eso permitió identificar las zonas donde se tuvieron buenos resultados y aquellos puntos en donde hace falta realizar algún ajuste. También se hablo de algunas propuestas de Ballagro. Entre ellos el “Nemat”, un nematicida microbiológico que tiene características de afectar directamente la capacidad reproductiva. Aunque poco mencionado, igualmente se señaló al Ecotrich, un fungicida microbiológico formulado a base del hongo Trichoderma harzianum. Se instó al permanente monitoreo. Por lo general la aparición del mal no se da en las raíces principales. Es común detrás de las más chicas.

También hubo orientaciones acargo de Agronómico, qué presentó su programa “Siganemátodo” y destinó parte del tiempo para explicar algunos servicios que se proponen, dentro de la agricultura inteligente. De igual forma se realizó la toma de muestra y de cómo almacenarla dentro de una bolsa térmica para preservar los organismos vivos y determinar el eventual grado de infestación del sistema radicular. Se instó a acercarse a los técnicos para mejores orientaciones.

En técnicas de aplicación, se instó a la dosis sugerida y apuntar a un uso maximizado del producto. Para ello se contó con una demostración con una pulverizadora. Se señalaron algunas orientaciones sobre el tamaño de gotas y otros. En materiales genéticos, Alcides Rodríguez, responsable de Desarrollo de la empresa BASF. Comentó sobre algunas propiedades y características de los materiales Credenz, entre estos, el CZ 6505 B, con tecnología RR1 y posicionado para el 10 de setiembre en adelante.

Comentó que presenta un buen comportamiento y responde al grupo de madurez de 6.5, la densidad propuesta es de 12 semillas por metro lineal, dependiendo de la época, porque ramifica bastante y ofrece un entrenudo interesante para proyectar un buen desarrollo de granos. Además, propone un techo productivo alto y se tienen algunos registros en la zona en torno a 4.500 kg por hectárea. De igual forma, se aprovechó para anticipar un material experimental, exhibido en la parcela durante la jornada técnica.

Genéticas de otros obtentores igualmente fueron expuestas. Endelson Daldín, de la firma Alag, ofreció detalles de las variedades TMG, entre ellas 7262 RR, TMG 7062, TMG 7063 IPRO y TMG 63 RR. En tanto, las orientaciones de otras como Syn 1163, Syn 1561, NS 6906, NS 5909, NS 6483, M 6210, M 6211, M 5947, M 6410, Sojapar 34, Sojapar R 49, Sojapar R 24 y Garra de Brasmax, estuvieron a cargo de Valesi, quien comentó la peculiaridad de cada una y cómo fue su desempeño en campo.

Con respecto a paquete tecnológico para la nutrición de las plantas, se presentó el programa nutricional de soja de Matrisoja, bajo el concepto de Nutriexcellence, desde la desecación hasta la cosecha, resultado de un trabajo de siete años. Posteriormente, Valesi presentó el Programa de Control de Enfermedades con que cuenta Matrisoja para su aplicación en el campo. Según el esquema explicado por Valesi, a los 35 posteriores a la emergencia, en la fase vegetativa, se sugiere emplear Oximunne y Resistent.

Reiteró la importancia de realizar aplicaciones preventivas, con productos adecuados y siguiendo las recomendaciones técnicas así como observar las indicaciones. Otros productos de BASF destacados en la ocasión fueron el herbicida Heat, los insecticidas Nomolt y Fastac. A su turno, Nora Huber, delegada técnica de mercado (DTM) de BASF, instó a no descuidar el complejo de fin de ciclo y acompañar todo el proceso de crecimiento siguiendo las recomendaciones técnicas.

Suplementación a campo y terminación en confinamiento

Tras la ya mencionada demostración con la pulverizadora, con lo que se cerró el ámbito agrícola, la comitiva se trasladó al sector ganadero. Se observaron lotes y se distribuyó el recorrido en etapas, la primera para hablar sobre terneros bajo el sistema creep feeding; la segunda y tercera sobre recría, diferenciada en el uso de proteico energético y proteico; la cuarta, un pre-confinamiento y, la quinta, el confinamiento propiamente dicho.

Las orientaciones estuvieron a cargo de DSM Nutritional Products Paraguay. Enrique Lurman, supervisor técnico comercial en Misiones, Paraguari, Ñeembucú y Chaco, fue el responsable de organizar la parte ganadera, en compañía de Bruno Alves Ferreira, encargado de la ganadería de Águila Negra. Juan Llamas, profesional paraguayo con especialización en el extranjero y actualmente asesor técnico comercial de la compañía, estuvo con las indicaciones principales durante el recorrido.

Acompañaron igualmente, Willian Pinto de Arruda Neto, gerente comercial de DSM Paraguay, José Benítez Irún, supervisor técnico comercial para Asunción y Zona Sur y otros. Llamas indicó que el trabajo impulsado en el establecimiento apuntó a ganar en eficiencia, para lo cual necesariamente se requiere de un menor costo posible. “Iniciamos hace corto tiempo pero ya tenemos algunos resultados que queremos mostrar y proyecciones con el tipo de suplementación estratégica”.

El costo estimado del periodo ronda unos 868 mil guaraníes. Informó que los resultados fueron muy buenos. En resumen, desde el creep feeding hasta la terminación, hubo unos 610 días, con un peso de kg peso vivo de más de 470 kg y un costo estimado por el periodo completo de 1,8 millón de guaraníes. La ganancia de peso promedio anual se ubicó en 720 kg por cabeza por día, con una producción de más de 260 kg de peso vivo por cabeza por año de media.
El costo fue estimado en torno a 7.000 guaraníes por kg de peso vivo de lo producido. “Se excluye el peso al nacer (unos 40 kg) y se calculan 437 kg. Tampoco hablamos de todos los costos, sino los de nutrición”, agregó. “En conclusión, con estos costos por periodo, hay un cálculo interesante. Podemos saber cuánto cuesta producir un kg de peso vivo y es el sistema que se implementa en Águila Negra. Es interesante en este sistema de integración cómo se diluyen los costos”, manifestó.
Lurman realizó igualmente una evaluación del evento y recordó que surgió como una propuesta para dar a conocer las soluciones que Matrisoja tiene en sus parcelas agrícolas, a las que se sumaron ahora el soporte de la experiencia en ganadería. “Levantamos en el año los datos y las proyecciones. Adaptamos al manejo interno y se lograron los resultados. La salida de campo fue un éxito porque queríamos dejar bien en claro el sistema productivo en este tipo de campo”, comentó.
Añadió que San Ignacio tiene campos mixtos. “Mostramos cómo con diferentes condiciones se puede encontrar un sistema altamente eficiente, altamente productivo, incluso en años difíciles como el 2019”. Con respecto a los productos ofrecidos por DSM Nutritional Producs Paraguay indicó que justamente la jornada permitió dar a conocer algunas sugerencias para cada etapa. A su turno, Bruno Álves Ferreira comentó que esta experiencia ayuda a disminuir el costo final de producción.
“La parte ganadera contamos con el acompañamiento de DSM que trabaja en función a una meta que desea alcanzar y la integración agrícola – pecuaria prácticamente arrancó desde el inicio de la estancia con buenos resultados. La parte agrícola está principalmente con soja y cuando no está, se trabaja con ganadería. Eso ayuda a aprovechar mejor el equipamiento disponible y se optimizan los recursos”, puntualizó. Se cultiva maíz, pero este es principalmente destinado al consumo interno, agregó.