General

16/08/2019

Innovador modelo forestal

La iniciativa de la prestadora de servicios Felber Forestal surgió en respuesta a la creciente demanda del consumo de madera en el país. La empresa incorporó tecnología para optimizar las tareas y tener más valor agregado que permita igualmente dar sostenibilidad a la actividad. A esto sumó un valioso aporte socioambiental, al incorporar la forestación en una zona históricamente de praderas naturales y ofrecer ocupar la mano de obra local.

La Felber Forestal es una empresa prestadora de servicios forestales constituida en el año 2007. Está abocada al desarrollo de campos, a la producción de plantas, a obras de drenaje, a movimiento y preparación de suelo, así como al establecimiento, el manejo y la conducción de forestación destinadas a producción de madera para industrias y biomasa, según se supo.

Una de las fortalezas de la iniciativa es que apostó a invertir en plantación forestal en áreas donde tradicionalmente se desarrollaron las pasturas naturales, destinando así la actividad ganadera como una de las principales. Con la introducción de la forestación, se abrió un nuevo frente para generar ingresos y ocupar la mano de obra local, así como brindar mayor cobertura al suelo.

Carsten Reinhard Felber, directivo de la firma, nos recibió en la estancia Curuzú, en Maciel (Caazapá), sede de la oficina y lugar de las plantaciones, estas que ya completaron 12 mil hectáreas en los últimos diez años. Primeramente recordó que la decisión surgió tras acompañar la inquietud por la desaparición gradual de los bosques nativos, acompañada inversamente en un aumento del consumo de madera.

“No es ningún secreto ver este proceso. No sabemos cuánto tiempo queda contar con bosques nativos en el país, mientras se incrementa el mercado de madera. Por eso decidimos invertir en la plantación forestal”, sostuvo. Manifestó su satisfacción al señalar que se logró atraer el interés de inversionistas extranjeros, principalmente de Europa, quienes captaron la idea y apoyaron el proyecto.

“Actualmente estamos en la etapa de inicio de cosecha e industrialización de la madera. El objetivo es procesar la mayor parte posible de la madera en la zona de plantaciones, para dar un valor agregado al producto y hacer más rentable el negocio forestal al inversionista”, indicó en otro momento. Resaltó que de esta forma se logra avanzar en la optimización de las tareas.

“Estamos con productos tales como chips, que se emplean en calderas de las industrias grandes del país; también con la carbonización. Hacemos carbón vegetal. Un pequeño porcentaje se comercializa para uso doméstico. La mayor parte se vende a una industria local para producir ferrosilicio”, explicó. Entre los artículos ofrecidos además de los mencionados están maderas aserradas, vigas y balancines, así como los impregnados.

“En la industria de impregnado, los productos pasan por un tratamiento químico. Así hay postes con vida útil más prolongada, con garantía de 20 años. Si el poste, por descomposición, queda inutilizado antes de la garantía, lo reponemos al cliente. En la zona en donde estamos es casi imposible conseguir postes de bosque nativo con buena durabilidad, por eso vemos que hay un mercado bastante grande”, dijo.

Con respecto a la competitividad, indicó que el producto reforestado impregnado es más barato que un buen poste nativo. “Con un poste de 10 cm de diámetro con 2,30 de largo, hablamos de un precio de 29.500 guaraníes. Comparando con algún quebracho del Chaco, que está en más de 50.000 guaraníes, es un precio bastante competitivo. Más la garantía que podemos brindar”, enfatizó.

Jorge Paiva, gerente de Felber Forestal, detalló como fue la evolución. En el 2008 se iniciaron las plantaciones de forma pequeña, con unas 250 hectáreas. Al 2009, se duplicó y llegó a las 500 hectáreas, para, desde el 2010, alcanzar las 1.000 hectáreas por año y trabajar en ese ritmo. Las plantaciones se iniciaron con Pinos y Eucalytus, los materiales disponibles entonces a nivel nacional.

“Lo que se inició como una empresa prestadora de servicios, con el tiempo terminó creando una oportunidad para formar plantaciones forestales en esta región. Con los programas introducidos en el 2011 se observó el cambio importante en la formación de plantaciones”, admitió, pues se dio paso a contar con un parque tecnológico de insumos, maquinarias y a un trabajo diferenciado de lo que es manejo de campo, subrayó.

Sistema de producción y aspecto social

El área de cosecha mecanizada está en desarrollo para optimizar las faenas forestales de aprovechamiento. La amplia variedad de propuestas incluyen chips de madera de Eucalyptus, carbón vegetal de Eucalyptus, postes y columnas de Eucalyptus y Pino con tecnología de impregnación, machimbres de Eucalyptus y Pino, pallets, mueblería, etc.

Se disponen de picadores móviles, hornos de colmena de barro, impregnadora en autoclave, carpintería en desarrollo para fabricación de mesas, bancos, sillas, placas, etc. A esto se sumará el aserradero que ya está en etapa de instalación y obras civiles y se prevé su producción para inicios del año 2020. Del total, se destaca el Eucalyptus con 89% del área de plantaciones.

De igual forma, de las cuales, el 20% corresponde a Sistemas Integrados de Producción con ganado vacuno. El 14% de las plantaciones del género Eucalyptus son de reproducción sexual (semillas) con incremento métrico anual de 22 m3. En tanto, el 86% de origen multiplicación asexual (clones) presenta una media de forestación de 34 m3, se informó.

Por su lado, las plantaciones de pino en su totalidad provienen de origen seminal. La ecorregión donde se desenvuelve la forestación pertenece a los pastizales de la Mesopotamia donde el clima subtropical húmedo y suelos con drenaje moderado a restringido son características principales. Es decir, la empresa apuesta a sitios donde formaciones boscosas nativas no existen, según se indicó.

Dentro de las áreas de plantación establecidas en el distrito de Maciel, anualmente se calcula un incremento de madera de más de 300.000 m3. Este volumen es destinado en la actualidad y en un futuro remoto en mayor cantidad a los diferentes productos que el grupo procesa y comercializa en el mercado nacional. El componente social igualmente se tiene en cuenta.

En este punto, el gerente general Jorge Paiva, recordó que este tipo de iniciativas contribuye a generar ocupación para la mano de obra, principalmente de la zona, lo que a su vez favorece a una mejor convivencia con los vecinos. En tanto, en lo que sería el departamento de Producción Forestal, la empresa emplea indirectamente a 120 personas aproximadamente (entre prestadores de servicio, contratistas y choferes, entre otros).

De igual forma ocupa directamente a 75 personas (entre administrativo, gerencial, mando técnico, mando medio, mecánicos, operadores, maquinistas, personal de campo y apoyo, entre otros). En otro momento, Paiva recalcó que con el arribo de los inversionistas, la firma se abocó a cumplir con los requerimientos del capital desembarcado.

“Con el interés para desarrollar inversiones rurales en Paraguay, a partir de entonces se dio la oportunidad que esta empresa pueda nacer en el país. Se eligió Caazapá, por ser un lugar donde existen praderas naturales. La intención fue formar plantaciones forestales en lugar donde nunca hubo bosques”, sostuvo, con lo cual además se cumplió con un beneficio ambiental de contar con áreas cubiertas de bosques.

Recordó que los desafíos en los inicios para el desarrollo de las plantaciones en el departamento de Caazapá fueron muchos, puesto que se debió enfrentar la escasa infraestructura regional, la poca disponibilidad de materiales genéticos adaptados al suelo y ambiente, así como problemas sanitarios, falta de conocimientos y otras limitaciones de los campos como drenajes y mano de obra calificada.

Logística, infraestructura e investigación

La empresa tuvo que dotarse de una infraestructura en obras y maquinarias para enfrentar el trabajo. Así se establecieron varias inversiones para favorecer el trabajo y contar con logística para cumplir con sus compromisos. El parque de máquinas para el drenaje dispone de una excavadora de 8 toneladas; más otra de 20 toneladas.

Para la preparación de suelo se adquirieron dos tractores de 185 HP, otro de 225 HP y uno de 165 HP, con sus respectivos implementos (rastras pesadas, livianas, subsoladores, taipeadora). Para el mantenimiento, se destinaron diez tractores de 100 a 125 HP con carretas forestales de 12 toneladas autocargables para desalijo de manera hasta industria o patios de acopio.

Se incluye un módulo Harvester+Forwarder, dos picadores móviles, cuatro molinetes forestales y catorce camiones baúl para transportar chips con piso móvil autodescargable. La impregnadora, la carpintería, el aserradero y la batería de hornos para la carbonización están para procesamiento de madera. Producen plantas y existe un vivero clonal, con una capacidad instalada de 2 millones de plantas por año.

A nivel país, falta más investigación en el rubro forestal, indicó Paiva, que todavía es incipiente. Sin embargo, las empresas privadas han invertido en capacitar a sus técnicos, operadores y personales de campo para obtener mejores resultados a campo en los últimos seis años, dijo. Recordó que si bien se llegaron a plantar unas 13 mil hectáreas, casi 2 mil ya fueron entregadas a los propietarios.

Situación actual y proyección

Actualmente, el crecimiento en áreas forestales está en un ritmo entre 1 y 2 mil hectáreas por año con plantaciones nuevas. A ello se sumó el incremento de la actividad mediante una industria de aserradero para con una capacidad de cortar 150 mil m3año. Esto a su vez permite abastecer cierto porcentaje del mercado local, sea en pallet, en machimbre y otros usos de madera cortada.

La demanda va en crecimiento y se da en varios frentes. “Prácticamente llegamos a todo el país. Depende de algunos productos para saber si hay mayor o menor interés, por ejemplo enviar postes impregnados al Chaco no tiene sentido pues hay mucha madera disponible en esa región. Pero columnas y otros productos sí tienen un pedido interesante y se llevan al Chaco”, admitió Felber.

La proyección apunta a seguir el crecimiento. Por ejemplo, en capacidad de postes, actualmente la producción ronda las 150 mil unidades por año. La meta en un futuro no muy lejano es aumentar a 500 o incluso 600 mil postes anuales, para abastecer la mayor cantidad posible del mercado local. Felber indicó que los datos evidencian un consumo a nivel país de 8 millones de postes por año.