El reporte indica que las lluvias llegaron tarde en las zonas más afectadas por la sequía y las altas temperaturas, ya que se reportan estadios y resultados muy diferenciados por departamentos y distritos, incluso, a corta distancia entre una finca y otra. “En su conjunto, la actividad agrícola se presenta como un mosaico, con diversos elementos que juegan a favor y en contra de los resultados esperados”, señala.
El informe menciona que los reportes de lluvias de las últimas semanas se encuentran entre 9 mm a 50 mm, que logró la recarga de humedad en determinadas zonas agrícolas del sur, mientras que en localidades del norte solo aplacó el polvo. No se reportaron precipitaciones en Independencia, San Pedro, entre otras ciudades.
Chía
En la Colonia Virgen de los Milagros, departamento de Canindeyú, se registraron lluvias de hasta 40 mm, lo que les permitió iniciar con la siembra de chía. “La soja zafra promedió entre 800/ha y 1.000 kg/ha debido a la sequía. La chía es nuestra esperanza para poder recuperar algo”, dijo Joel Santacruz.
Por su parte, Daniel Ropke, productor de Obligado, Itapúa, indicó que los cultivos están bastante afectados, las lluvias llegan tarde por lo que el panorama es complicado para los productores. “Veremos si después de estas lluvias mejora algo”, expresó.
En tanto que, Marcio De Souza, dijo que el agua llegó un poco tarde en el nordeste, ya que algunos cultivos de maíz y sorgo se encontraban en floración, además algunas cabeceras de las parcelas de soja no germinaron bien, con la calidad comprometida, según explicó.
En relación al sorgo, las condiciones climáticas también favorecieron la aparición de plagas que fueron difíciles de controlar, como en el caso de los cultivos de zafriña que fueron afectados. El informe menciona que ante la condición climática que persiste, se mantiene la incertidumbre de si mejorará no el comportamiento del clima y, por ende, en cuanto a los precios para los próximos meses.
Fuente: La Nacion