Notas

31/03/2020

Plagas y enfermedades comunes en las orquídeas

Por: Ing. Agr. Rudy Lugo Santander - Desarrollos Madereros S.A. - Hernandarias - Paraguay - Cel: (0983) 937 849

Quién se interesa por el apasionante Mundo de las Orquídeas, siempre encontrará todo lo necesario para mantenerlas sanas y vigorosas.

Para que las mismas se mantengan sanas, se las debe ofrecer las condiciones de cultivo, requeridas por cada género y/o especie.

El control de plagas y enfermedades requiere pasar por una revisión de los tradicionales métodos utilizados por los Orquidófilos y productores.

Una de las condiciones básicas y muy importantes, es respetar los requerimientos del cultivo en sus diferentes etapas de desarrollo, como humedad, fertilizaciones, ventilación, temperatura, luz etc.

En una planta mal nutrida, las plagas y las enfermedades se desarrollan con mucha más facilidad.

La aplicación de productos químicos, para nutrirla así como para contrarrestar la aparición de plagas y/o enfermedades requiere del control de profesionales en el área.

Una desacertada aplicación de los productos puede traer consecuencias negativas a la planta, puede ocasionar un desequilibrio en la absorción y transformación de las sustancias necesarias para su crecimiento o poner en riesgo la sanidad de la misma favoreciendo la aparición de otras enfermedades.

Un factor muy importante que todo cultivador debe tener en cuenta es la prevención, y eso se consigue a través de prácticas culturales sencillas pero que son absolutamente necesarias para mantenerlas sanas.

Prácticas de prevención

•     Al realizar algún corte o herida a la planta, sea esta de hoja, raíz o vara floral se deben esterilizar las tijeras o cualquier otro instrumental a utilizar, las mismas pueden ser esterilizadas con flameadores a gas o alcohol, o manteniendo reposadas las tijeras en un frasco con alcohol al 70%, a cada corte realizado se reposa la tijera en el medio desinfectante.

•     Antes de trabajar preparar las plantas, lavando la planta con agua, separando las partes dañadas o afectadas, dejarlas reposar (un día a dos) previo lavado con fungicida, dejándolo en un lugar bien ventilado, a media sombra y ambiente húmedo para darle tiempo a que cicatrice la herida o corte ocasionado la cual puede constituirse en una puerta de entrada a muchas enfermedades fungosas y/o virósicas.

•     Las macetas a ser utilizadas deben estar limpias sin vestigio de restos de cultivos anteriores.

•     Si se presentará alguna planta con problema sanitario, lo primero es aislarla del lote, y comenzar con su tratamiento.

•     No abusar de fertilizaciones nitrogenadas, usar productos requeridos para cada etapa de crecimiento, por ejemplo. Un fertilizante 8.15.10 en la primera etapa de crecimiento, un triple 18 en una etapa de mayor desarrollo, un 9.45.15 o 10.50.10 para favorecer una buena floración, en la mayoría de los casos se presentan productos específicos para cubrir esas demandas en sus diferentes etapas de desarrollo.

•     Respetar la época de aplicación de los productos fertilizantes atendiendo a que muchas orquídeas presentan épocas de reposo, la cual antecede a la de la floración o desarrollo vegetativo.

•     Época de trasplantes o división de plantas, tener en cuenta la época del año y los cuidados posteriores a esa actividad, un mal trasplante puede comprometer la vida de la planta.

•     Mantener las plantas a una distancia que favorezca la libre ventilación de las mismas, evitar que estén muy encimadas.

•     El medio o sustrato donde será cultivada debe estar libre de patógenos, debe ser tratada para evitar contagios que puedan comprometer su desarrollo.

Las condiciones ambientales y de nutrición son aditamentos muy necesarios para favorecer su mejor crecimiento y vigor, que no deben ser descuidadas a la hora de cultivarlas, un ambiente con escasa luz, mala ventilación mucha humedad son el ambiente propicio para la aparición de ciertas plagas que encuentran el habitad ideal, como los caracoles, las babosas; que al alimentarse de partes de las plantas ocasionan heridas dejando expuesta al ingreso de patógenos que pueden desarrollar enfermedades.

Las cochinillas son plagas que se dan en ambientes cálidos y mal ventilados, unos insectos con diversidad de formas y texturas, las hay blancas algodonosas, otras planas de color piel que semejan a pequeñas escamas. Estas se alimentan succionando la savia, y haciendo que la planta vaya perdiendo vigor, volviéndose clorótica y deshidratada.

Mejorando la ventilación, y una buena densidad se puede evitar su propagación.

Las hormigas comunes y cortadoras también pueden causar estragos en un Orquidiario, algunas hormigas trabajan en sociedad con otras plagas, es muy común verlas trabajar con las cochinillas y los pulgones, haciendo que se diseminen más rápidamente.

Las orugas en su etapa de larva se desarrollan entre el sustrato o en las pequeñas hojas, se alimentan de las partes de la planta, ocasionando lesiones importantes. Con un insecticida de contacto específico para orugas, se los mantiene a raya. Para controlarlos es bueno contar con un buen programa de prevención.

Otras plagas ocasionales, como las langostas, ratas, y hormigas pueden causar lesiones importantes a la planta.

Las enfermedades más comunes que se dan en un cultivo de Orquídeas son las fungosas, generalmente cuando las condiciones sanitarias y de ambiente del vivero no son las más óptimas.

Las enfermedades más comunes son aquellas que fueron propiciados por las lesiones ocasionadas por algunas plagas, por daños mecánicos ocasionados al trasplantarlos o por las malas condiciones ambientales en que se desarrolla el cultivo.

Un sustrato reutilizado, mal desinfectado puede trasmitir enfermedades, una muy común es el fusarium que destruyen los vasos conductores de la savia de la planta, esta va penetrando por los pseudotallos dirigiéndose hacia las hojas, las partes afectadas van quedando deshidratadas y cloróticas.

También tenemos aquellos que aparecen cuando nos excedemos con el riego sumado a un mal drenaje del agua, un sustrato mal desinfectado, malas condiciones ambientales de humedad alta y mala aireación, que favorecen el ataque de hongos como Phythoptora, Phythium que causan pudrición de raíces y cuello de la planta.

La Botrytis cinerea, se dan en recintos cerrados mal aireados, cálidos y elevada humedad en las flores se manifiestan como pequeños puntos negros, dejándolas con un aspecto desagradable e inutilizando la presentación de la planta.

Manchas foliares o Antracnosis, ocasionado por el hongo Colletotrichum sp, se da cuando la planta sufre lesiones o un exceso de fertilización nitrogenada, favoreciendo el ataque de éste patógeno causante de la enfermedad, se manifiestan en forma de manchas irregulares de color marrón rodeada de un halo amarillo.

Una de las enfermedades más devastadoras son las causadas por los virus, la cual no tiene cura y llevan a nuestras orquídeas a la muerte, los síntomas pueden confundirse con otras enfermedades, los más comunes son cambios en la coloración (en forma de mosaicos, anillos, bandas, estrías); alteraciones en el crecimiento como menor tamaño de órganos, enrulado de las hojas o flores, etc. Para un diagnóstico certero se debe recurrir a los análisis de laboratorios para determinar con certeza el problema. Para contrarrestar la aparición de plangas y enfermedades siempre es conveniente antes de iniciar a trabajar tener en cuenta los conceptos básicos de prevención, de esa manera estaremos seguro de no trasmitirles enfermedades o facilitar las condiciones desfavorables a su desarrollo.