Las consecuencias del Covid -19 también se hicieron sentir en el cultivo de champiñón. Este producto considerado gourmet, cuyo principal mercado eran los restaurantes y supermercados gourmet, redujo su producción al 30%. También busca nuevas alternativas de comercialización, comentó el productor Tito Martínez, quien viene cultivando y comercializando estos hongos comestibles en el país con la marca Cosecha-19, desde hace más de tres años.
Este productor, que cultiva champiñones de las variedades más deseadas, incursionó en esta actividad buscando una alternativa de alimentación saludable para la sociedad, y a la vez fomentar la ocupación de mano de obra. Cuenta con sus instalaciones en el municipio de Luque y estuvo avanzando bien con este rubro no tradicional hasta que se declaró la cuarentena como consecuencia de la pandemia Covid-19, que, como para muchos, le obligó a rediseñarse, pero no abandonó la producción, ante la expectativa de que esto pase, y que las actividades vuelvan a normalizarse.
Tito Martínez comentó a Campo Agropecuario Multimedia que siguen produciendo, pero limitaron los cultivos al 30% de lo que venían realizando. “La mitad de lo que vendíamos antes eran para restaurantes y todos están cerrados. Por otro lado, por esta incertidumbre la gente no gasta en productos que son considerados gourment en Paraguay, porque es un fruto más caro que otra verdura o fruta básica, y como es un rubro innovador tiene un precio más alto, porque la población no consume mucho”, dijo.
Enfatizó que con la producción de champiñones fueron muy castigados económicamente con esta pandemia, más por las medidas drásticas del gobierno, que tal vez fueron necesarias, pero a este sector golpeo fuerte. “Las medidas del gobierno, necesarias o no, nos cortaron las piernas ofreciéndonos muletas a cambio, que en la realidad no llega, hay mucha burocracia y no hace reactivar la economía de las pequeñas empresas. Con estas medidas los vinculadas al sector gastronómico fuimos muy castigados”, reiteró.
El emprendimiento actualmente trabaja con la mitad de su plantel personal a la espera que esto se reactive, aunque lo ven que va a ser lento.
El productor también expresó desacuerdo con el procedimiento de la cuarentena inteligente, que nuevamente es castigado fuertemente al sector gastronómico, donde mucha gente tiene su fuente de ingresos. “La medida inteligente debe contemplar medidas, que evite contagiarnos, pero que el sector económico esté activo”, dijo.
Higiene extremo
En cuanto al protocolo de producción, Martínez explicó que la producción de este fruto sin dudas requiere mucha higiene, porque los hongos comestibles se contaminan muy fácilmente, por la ropa u otra cosa. “Estamos incentivando mucho el lavado de las manos, las personas realizan esta práctica, cuando entran y salen, prácticamente de manera obligatoria”, dijo.
Expresó que siguen con la esperanza de que esto cambie, pero también es consciente de que habrá altos y bajos. Está optimista y como buen emprendedor buscando nuevas estrategias de comercialización.
Delivery
Comentó que desde este mes empezaron a realizar la venta a través del delivery. “Son muy pocos aún los pedidos, la gente pide 3 a 4 bandejitas, pero ya estamos llegando hasta San Antonio. Si este sistema de comercialización no repunta solo, considerando que los champiñones son productos gourmet, estamos analizando adherirle otros productos sanos, como leche de coco nacional o té verde”, dijo.