General

04/09/2018

Aditivos líquidos y sus funciones

Introducción. La evolución del sector agrícola mundial se ha dado por la acción de diversos factores. Entre ellos la creciente demanda por alimentos y materias primas, a las exigencias en el estándar de calidad de sus productos y la necesaria optimización y conservación de los recursos naturales. Estos requisitos pueden ser atendidos siempre que sean empleados todos los recursos necesarios para la maximización del potencial productivo de los cultivos, evitando la acción de los factores de pérdidas, tales como la fertilidad del suelo insufi ciente, genética inadecuada y la acción de los agentes de daños. El control de estos agentes de daño, puede ser realizado por el uso de agroquímicos, los cuales cuando se aplican de forma correcta, alcanzan el objetivo en cantidad necesaria para el control satisfactorio y no se dispersan en el medio ambiente, evitando tanto la contaminación como daños a los cultivos adyacentes. La minimización de las pérdidas durante las aplicaciones de agroquímicos puede ser obtenida por el uso de la tecnología de aplicación correcta. Entre los factores tecnológicos más importantes están la selección de la punta de pulverización y adecuación del espectro de gotas a las condiciones ambientales, la calibración del pulverizador, el uso de producto recomendado y la adición de adyuvantes que puedan elevar su eficiencia.
Histórico. Los agroquímicos tienen en su formulación ingrediente activo y otros componentes químicos que ayudan a la acción de la molécula. Una práctica que se ha vuelto muy común en los últimos años es la adición de aditivos líquidos a ser pulverizado, ya que pueden aumentar la eficiencia y la acción en la aplicación para el control de los agentes de daño. Los procesos de mezcla en el tanque, la compatibilidad de liquido, la fl uidez en el sistema, la formación de gotas, la dispersión de las gotas en el blanco, la evaporación y la volatilidad se cambian a medida que las diferentes aditivos se añaden a la calda, por lo que es esencial y recomendable que el agricultor tenga sus propios métodos comparativos de identificación de las acciones de los aditivos.


Grupos funcionales. La mejora de la eficiencia del agroquímico asociada con el coadyuvante puede darse de diversas formas, dependiendo del grupo funcional y la adecuación de sus características a las condiciones en el momento de la aplicación. El estudio de estas características de los aditivos asociado a los agroquímicos que permite su clasificación en por lo menos cuatro grupos funcionales.

_ Grupo 1. Efectos de superficie activa. Este grupo estudia los efectos de tenso activos de los aditivos en el caldo sobre la estabilidad físico-química, formación de espuma, la floculación, la cristalización, la formación de emulsiones y concentración miscelar crítica, entre otros. Estas pruebas se realizan, normalmente, en el laboratorio con base en las normas preestablecidas.

_ Grupo 2. Efectos agronómicos. Este grupo estudia el efecto de los aditivos sobre los aspectos que elevan la eficiencia de los agroquímicos debido a la relación de dispersión de la gota, el índice de cobertura y deposición sobre el objetivo, la penetración del producto en la cutícula de la hoja, absorción y translocación. Estas pruebas se llevarán a cabo, preferentemente, sobre las propias plantas, permitiendo además de la comprensión de las diferencias de comportamiento entre los productos, también la predicción de la mejor tecnología a ser empleada en las distintas condiciones encontradas en el campo.

_ Grupo 3. Efectos ambientales. Este grupo estudia los parámetros de seguridad y considera las características relacionadas con los productos y el medio ambiente, para la predicción de las posibles pérdidas, simulando alternativas para la reducción de la contaminación ambiental. Los parámetros más conocidos y estudiados son: Potencial de deriva, potencial de volatilización y de evaporación, la clasifi cación del espectro de gotas, la amplitud relativa de la masa total de gotas, el porcentaje de gotas menores que 150 y 100 µm, escurrido y lavado por la lluvia. Las pruebas de este grupo son realizadas asociando cultivos de interés agronómico y equipos sofi sticados, con metodologías de análisis que permitan la identifi cación precisa de estas pérdidas.

_ Grupo 4. Efectos operativos. Este grupo estudia los efectos de la composición de la cola sobre las condiciones de operación de los rociadores. Las condiciones de operación más afectadas son: cantidad de residuos en los puntos de restricción de los circuitos hidráulicos, servicio de limpieza y descontaminación de los rociadores y la resistencia y durabilidad de los componentes. Estas pruebas requieren de la construcción de equipos asociados a los instrumentos de medición que simulen condiciones de operación más cercanas a la realidad, permitiendo la corrección de problemas y orientaciones en el desarrollo de las máquinas.


Consideraciones finales. La necesaria evolución de la tecnología empleada en la producción agropecuaria ha posibilitado la superación de diversos desafíos del sector. Entre ellos, el combate a los agentes de daños de difícil control con agroquímicos registrados y de bajo impacto ambiental. También su aplicación en condiciones ambientales desfavorables, ya que el cultivo diversificado sobre grandes áreas en la región de clima tropical, requiere pulverizaciones frecuentes y en el momento correcto, obligando a los equipos a operar en las más variadas condiciones de temperatura, humedad relativa y viento. Aun así, la mejora de la productividad agrícola basada año tras año, indica que las técnicas utilizadas han ofrecido apoyo a este crecimiento, destacando la modernización de los equipos, los productos y las técnicas de aplicación. Entre los productos que ocupan progresivamente este mercado, están los aditivos, que con sus variadas funciones y características, han sido incluidos en el agronegocio para maximizar el potencial de control de los agroquímicos protegiéndolos de las pérdidas y la mejora de su relación con el objetivo, no hay más dudas sobre el cumplimiento de sus funciones. Se observa sin embargo, que varios productos en uso aún no han sido estudiados, careciendo por lo tanto, de información acerca de su valoración o, incluso, sobre su calidad. Estas faltas serán corregidas en la medida en que los criterios adoptados por los productores para el uso de estos productos sean más severos y que las empresas puedan evaluar los aditivos de forma más cuidadosa y precisa. Para que esto suceda, la evolución de las técnicas de evaluación de los aditivos debe producirse en la misma proporción en que se aplican las evaluaciones de los agroquímicos, lo que permite que su eficacia sea comprobada y que su potencial de mejora en la calidad de la pulverización puede ser aplicado de la mejor manera, la valoración de este mercado y elevando aún más, el potencial productivo de la agricultura.