El Ing. Agr. Hugo Pistilli, director de Selección Genética, resaltó el crecimiento que tiene lechería en la zona y que posicionó a la cuenca de San Pedro como la segunda mayor del país. El profesional igualmente acompañó la feria agrotecnológica como jurado de ejemplares exhibidos previamente al remate, con un método más didáctico que de calificaciones. La jornada lechera de la FASP arrancó por la mañana con charlas en el salón auditorio y contó con el respaldo de varias empresas, entre ellas Selección Genética, y de la Asociación de Productores de Leche y Criadores de Razas Lecheras (Aprole).
Felicitó a la organización por dar el espacio a la lechería, que para esta segunda edición de la muestra aumentó en protagonismo. Con respecto a Selección Genética, el Ing. Agr. Pistilli resaltó el compromiso con el desarrollo de la región y el acompañamiento continuo a los productores de la cuenca lechera de San Pedro. Señaló que este es el segundo año consecutivo en que la firma participó de la feria, apoyando a la segunda cuenca de mayor producción lechera del país, una zona extensa que avanza de manera sostenida en el mejoramiento genético mediante inseminación artificial y el uso de toros probados.
“Estamos muy contentos. El 50% de los animales expuestos y rematados hoy son fruto de nuestro trabajo, y eso nos llena de orgullo. Venimos aportando desde hace 28 años con la representación de Célexar en Paraguay”, afirmó el entrevistado. Destacó que el enfoque de la empresa se centra en identificar el biotipo más adecuado para la región, trabajando con razas predominantes como el Holando y orientando el apareamiento para potenciar características de importancia económica. Añadió que cada vez más productores comprenden que invertir en genética es clave para elevar los estándares productivos.
Agregó que, durante los recorridos por los establecimientos de la zona, el equipo de Selección Genética detectó los principales motivos de descarte del rodeo tales como cojeras y problemas de pezuñas, mastitis, baja producción de leche e infertilidad. Según Pistilli, se deben priorizar estos aspectos al seleccionar toros para mejoras significativas en la cuenca. “Para alcanzar promedios superiores a 30 litros se requieren al menos tres generaciones. Es decir, unos diez años de trabajo genético para llegar a promedios por encima de 35 litros. Quien adquirió vaquillas en esta feria dio un paso muy importante hacia el futuro de su rodeo”, expresó.
Resaltó que este impulso marcó “un antes y un después para la FASP como cuenca lechera”, augurando una etapa de crecimiento sostenido basada en el mejoramiento genético y el compromiso del productor. Finalmente, el director agradeció a los organizadores de la feria, especialmente, a la firma El Rodeo, la consignataria encargada del remate, y a los productores, tanto los que ofrecieron ejemplares de primer nivel, como los compradores, que permitieron cerrar una jornada lechera con buenos negocios. También, a la Aprole por seguir incentivando eventos como estos para el fortalecimiento del sector, así como a los participantes de la jornada.
